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domingo, 14 de julio de 2013

Rompecabeza de talentos


Cuando le llamé lo primero que hice fue recordarle aquel día donde lo abordé para averiguar si era músico y si dependía de la música para vivir, sus respuestas se anularon: Sí era músico y no depende de ella para vivir. A las ocho y quince del siguiente día me encontré con él. Compartía conmigo su momento de descanso y reflexión antes de su concierto. Sentados frente a los ascensores del piso cinco, solo nos separaba una pequeña mesa donde yo apoyaba mi morral con el equipo fotográfico que él observaba con recelo y curiosidad.

Comenzó a hablar de sus inicios en los años sesenta. En medio de una sonrisa su compañero dejó ver una expresión de asombro «esto va para largo» dijo mientras daba media vuelta para retirarse. El tenía una historia que contar. Con calma y cuidando los detalles me llevó de paseo por sus diversas experiencias laborales, desde sus inicios en el mundo del turismo hasta sus trabajos como publicista, todo esto y en paralelo le dedicaba tiempo a formar parte de bandas como Los Holidays, la primera banda de rock venezolano en los años sesenta, Casablanca o entretanto se dedica a incursionar en el blues mientras mas nadie se atrevía. Pudo haberse dedicado a la música, sin embargo no compartía los códigos de la industria del espectáculo, él se considera un artista.

Adornaba sus jeans con una hebilla plateada de águila, su sombrero negro tenía un cordón morado para completar la imagen de rockero clásico y a la moda con su camisa Columbia. Al montarse sobre las tablas explota su energía y vitalidad acompañado con las notas del primer instrumento musical de la historia humana. Entregado a su público lleno de pasión y vigor atrapa a la gente que se asoma por la puerta del local y estas terminan seducidos por el ritmo contagioso del rock en la voz de Wolf: el abuelo del rock venezolano.

Como en un rompecabeza de talentos mis retratados se ganan la vida en un trabajo común. Johnny, Luis, Eduardo... todos viven para regalarnos a los melómanos y a su audiencia lo mejor de sí mismos, lo mejor de su música. Ninguno de ellos vive de la música pero sí para ella. A estos músicos les dedico este trabajo fotográfico.

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